Por: Israel C. Turcios Rodríguez
El departamento de Olancho que es uno de los más extensos, cuenta con los recursos naturales más preciados y de máxima utilidad para el desarrollo económico y social de la nación hondureña. Este departamento cubierto de bellos paisajes y de encantadoras mujeres, fue creado el 28 de junio de 1825; limita al norte con los departamentos de Yoro, Colón y Gracias a Dios; al sur, con la República de Nicaragua y el departamento de El Paraíso; al este, con la República de Nicaragua y el departamento de Colón; y al oeste, con los departamentos de Francisco Morazán, El Paraíso y Yoro.
El departamento de Olancho, tiene 23 municipios; teniendo por cabecera departamental la ciudad de Juticalpa, ubicada en una planicie, en la ribera derecha del río de su mismo nombre, flanqueada por esbeltos pinares y por perfumadas margaritas y azucenas. Esta ciudad cuyos edificios antiguos, presentan un estilo dórico, fue fundada por Alonso de Ortiz, con un grupo de españoles en 1764; elevada a la categoría de ciudad en 1835 y a cabecera departamental a partir del 12 de agosto de 1865, traslado que se hizo del municipio de Manto.
Olancho, tierra de promisión, tenía en un pasado ya lejano, grandes cantidades de recursos naturales (BOSQUES, AGUAS, ANIMALES Y MINERALES), por eso el General Morazán, el héroe hopónimo, después de conferenciar con los "Rebeldes" en los Vueltas del Ocote, el 21 de enero de 1833, escribió en su manifiesto de David, aquella frase inmarcesible y que dice: "Ni el oro del Guayape (río de Olancho), ni las perlas del Golfo de Nicoya, volverán adornar la corona del Marqués de Aycinena". Infortunadamente y debido en gran manera, a la indiferencia de las autoridades superiores, gran parte de aquellos recursos, han sido dilapidados sin ninguna misericordia, dejando el departamento convertido en un desierto y que las consecuencias las vamos a sentir después de la mitad del presente siglo.
Por una gracia divina, en los últimos años ha aparecido el padre Andrés Tamayo, quien ha defendido con todo fulgor, la explotación de los bosques, pero el eco de sus voces muy poco se ha hecho sentir en las esferas gubernamentales; pues en la actualidad, el Estado, el gobierno, la fuerza policial y la educación está en poder de la clase económicamente pudiente; pero habrá un día que se transformará el orden político, económico y social y emergerá una clase nueva, e integrada por obreros y campesinos.
El departamento de Olancho es la cuna que en años ya idos, albergó a una pléyade de poetas, periodistas y escritores; José Antonio Domínguez, Salatiel Rosales, Froylán Turcios Canelas, Timoteo Miralda Reyes, Medardo Mejía, Federico Peck Fernández, Abel García Cálix, Miguel Ángel Osorio, Hostilio Lobo Cálix, Alfonso Guillén Zelaya, Raúl Arturo Pagoaga y las poetisas líricas: Rafaela Turcios, Clementina Suárez, Paca Navas de Miralda, Adilia Cardona de Angulo e ídem. También este departamento ha dado tres presidentes de la República, por su orden: Francisco Zelaya y Ayes (1841); General Manuel Bonilla Chirinos (1913) y doctor Francisco Bertrand (1917) y posiblemente en los años venideros tengamos otro, pues están en la palestra política dos olanchanos de muchos méritos: El licenciado Porfirio Lobo Sosa líder carismático, que con sus dotes de orador, mueve las "masas" y sus adversarios políticos se ponen de pie; y el ingeniero José Manuel Zelaya Rosales, el líder más connotado dentro de su partido.
En la historia militar y en algunos capítulos llenos de bizarrilla, aparecen los nombres de una legión de oficiales, olanchanos, graduados en la Escuela Militar que en esta ciudad capital, fundara el coronel de nacionalidad chilena, LUIS SEGUNDO OYARZON (1908). General Santiago Meza Cálix (Catacamas), mayor Juan Olivera Lanza (Salamá); mayores: Samuel Centeno, Guillermo Víctor Alvarado, Pedro C. González (Juticalpa); capitanes Samuel B. Gálvez (Juticalpa) y Tomás Gómez Rojas (Catacamas). En la clase 1912; capitanes, Melecio Zelaya y Emilio Matute (Juticalpa); y el coronel e ingeniero Miguel Angel Ramos, egresado del heroico Colegio Militar de México, en 1906, (de Concordia).
En la actualidad hay una recesión continental en todos los órdenes de la vida; se han estacionado las concepciones económicas, literarias, filosóficas, políticas, científicas y tecnológicas. Esperamos que los diputados al Congreso Nacional por el departamento de Olancho, se sumen al reclamo justo y patriótico del padre Tamayo, quien ha expuesto su vida en pro de una sociedad más justa y más sensible al dolor humano.
Fuente:Israel C. Turcios Rodríguez, 08 de Abril del 2018, http://www.angelfire.com/ca5/mas/dpmapas/ola/ola.html
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